Episodio 3. Sangre infernal

El episodio 3 profundiza en la identidad de Dante y las fuerzas entrelazadas que lo rodean. Se abre con un flashback: una joven llamada Mary hace un juramento de cazadora de demonios, solo para ver a su padre, John, caer en la obsesión con el otro mundo. En el presente, un equipo encubierto bajo el vicepresidente de EE. UU. orquesta una operación para obtener el amuleto de Dante, la clave de un sello legendario que mantiene a raya al reino demoníaco. Anders, el único sobreviviente de una emboscada pasada del Conejo Blanco, ahora está integrado en el grupo de trabajo de élite bajo el mando de Mary. Mientras tanto, Enzo, obligado nuevamente, intenta entregar a Dante a agentes del gobierno. Durante el encuentro, se revela que varios equipos de mercenarios están convergiendo en Dante. A pesar de la trampa, Dante los supera a todos. Un tenso enfrentamiento con Mary resulta en que ella le dispare a Dante con una bala anti-demonios, confirmando que no es completamente humano: es un híbrido. Ella le dice que el amuleto que aprecia era parte del antiguo transmisor de Sparda, que mantiene a la Tierra a salvo de la invasión del infierno. Mientras Dante se defiende de otro cazarrecompensas, un interludio musical suena durante el caos resultante, reforzando su estilo y desafío. El episodio termina con Mary capturando a Dante usando tecnología avanzada, pero él rápidamente revierte la situación, escapando una vez más. Mary confirma la teoría del medio demonio, y lo que está en juego de la posesión del artefacto ahora es más claro que nunca. Dante ya no es solo un objetivo, es una bomba de tiempo en el próximo choque de dimensiones.